¡Encuentra tu Norte y nunca más te pierdas! Con materiales muy fáciles, te enseñamos en este experimento a realizar una sencilla brújula casera.
Materiales:
- Una aguja.
- Un imán.
- Un plato o recipiente aplanado.
- Un corcho de entre 6 y 12 mm de grosor.
- Un poco de cinta adhesiva.
Procedimiento:
- Toma la aguja y frótala al menos 50 veces en una sola dirección con uno de los polos del imán.
- Llena el recipiente con agua y deja flotar el corcho en ella.
- Con mucho cuidado, centra la aguja en el corcho y la fija con un trozo de cinta adhesiva.
- Acerca el imán a la aguja y verás cómo gira al verse atraída por él ¡Ya tienes tu brújula casera!
Explicación:
Al frotar la aguja con uno de los polos del imán, ésta se magnetiza y comienza a repeler los polos con distinto signo al suyo y a atraer a los del mismo. En cambio, cuando no hay ninguna interferencia, la aguja siempre apuntará al Norte de la Tierra. Esto ocurre porque la Tierra actúa como un gran imán, y su norte magnético es lo que nos permite crear brújulas con las que nos orientamos en el espacio.